K2D3

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Investigaciones más y más numerosas demuestran el papel mayor de la vitamina D en por lo menos 17 patologías distintas, como cáncer, enfermedades cardíacas, accidentes vasculares cerebrales, hipertensión enfermedades autoinmunes, diabetes, depresión, dolores crónicos, artrosis, osteoporosis, anomalías congénitas, enfermedades periodontales, etc. 

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Las fuentes y las formas de vitamina D

Normalmente, el aporte más importante de vitamina D se efectúa a través de la piel. Efectivamente, bajo la acción de los rayos solares, el organismo sintetiza la vitamina D3. Encontramos también esta vitamina en la alimentación. El ergocalciferol o vitamina D2 está sobre todo presente en los vegetales. En cuanto al colecalciferol o vitamina D3, proviene esencialmente de los productos animales de los que los pescados de mar grasos, el aceite de hígado de bacalao, la yema del huevo y en una proporción más baja en los despojos (entrañas), los patés, los champiñones...

Las diferentes formas de vitamina D son transportadas y después metabolizadas por el hígado en calcidol o 25(OH)D3. En seguida, a nivel de los riñones, toma una forma activa, el calcitriol o 1,25-(OH)2D3, forma responsable de la mayoría de los efectos benéficos de esta vitamina.

Las increíbles propiedades de la vitamina D

Previamente, la vitamina D estaba únicamente considerada como necesaria para la prevención del raquitismo y de la osteomalacia. Su rol en la prevención de la osteoporosis y en las fracturas del cuello del fémur (en asociación con un aporte de calcio del que forma parte el pidolato) de la persona anciana está actualmente bien establecido.

Sin embargo, los beneficios de la vitamina D van mucho más allá de la salud del esqueleto con unos efectos extra óseos originales y a menudo inesperados. Esto es lo que han puesto en evidencia estudios clínicos y epidemiológicos del todo apasionantes.

 

La vitamina D reduce la mortalidad 

Numerosos resultados de estudios han mostrado que su carencia aumenta los riesgos de mortalidad debida al cáncer, a las enfermedades cardiovasculares y a la diabetes de tipo II. Recordemos que estas patologías son responsables de aproximadamente un 70% de los decesos en los países civilizados.

La vitamina D y el sistema inmunitario

Los investigadores han probado igualmente que esta vitamina interviene a nivel de los procesos inmunitarios protegiendo al organismo de las infecciones. Es por esto que las personas con carencia sufren más frecuentemente resfriados y gripe durante el periodo invernal. Además de su acción inmunoestimulante, la vitamina D posee también una acción inmunomoduladora, o sea reguladora de los elementos inmunitarios. Eso explica su acción favorable en las enfermedades con un componente inflamatorio o auto-inmune.

Vitamina D y cáncer

Los investigadores explican que además de contribuir a prevenir numerosas formas de cáncer, esta vitamina podría igualmente ralentizar la progresión de la enfermedad en las personas ya afectadas.

La vitamina D y el corazón

Otra evidencia: una carencia de vitamina D, incluso moderada, podría incrementar el riesgo de padecer problemas cardiovasculares. Parece ser que las personas carenciadas son dos veces más afectadas por los infartos, las insuficiencias cardíacas o los accidentes vasculares cerebrales, comparativamente a aquellas en las que las tasas de vitamina D son elevadas.

 

La vitamina D y la memoria

 

Otros resultados demuestran que los hombres con tasas de vitamina D más bajas son los mismos en los que las capacidades intelectuales disminuyen más al envejecer. Un equipo de investigadores de la universidad de Los Ángeles ha descubierto que la vitamina D y la curcumina serían útiles en la prevención y el tratamiento de la enfermedad de Alzheimer.

La vitamina D y el tono muscular

La acción favorable de la vitamina D sobre el sistema osteo-articular se une a un aumento de la fuerza muscular. Un estudio realizado en casas de reposo en persona mayores ha mostrado una reducción del 22% de caídas en personas suplementadas con vitamina D.

¿Cómo establecer si existe una carencia de vitamina D?

Ya hemos explicado que la carencia de vitamina D es muy frecuente en todos los habitantes del hemisferio norte. Las estadísticas demuestran que alrededor de un 80% de los franceses, por ejemplo, tendrían falta de vitamina D durante el invierno.

La sola manera de tener la certitud es efectuar una toma de sangre que medirá las tasa de calcidiol sanguíneo. Debería ser superior a 50 ng/ml (nanogramos por mililitro durante todo el año, tanto en niños como adultos. El resultado ideal debería avecinarse a 60-80 ng/ml. Lo que refleja algunas reservas de vitamina D. 

Atención, algunos laboratorios indican un valor normal a partir de 30 ng/ml. Esta cifra es totalmente insuficiente. Otros laboratorios utilizan una unidad diferente, a saber, los nanomoles por litro (nmol/l) más bien que los nanogramos por mililitro (ng/ml).

Para convertir los nmol/l en ng/ml, hace falta dividirlos por 2,5 (ejem: 125nmol/l = 50ng/ml). 

La vitamina K2: la garantía de huesos sólidos y vasos sanguíneos limpios

Como para la vitamina D, existen dos formas de vitamina K. La vitamina K1 (filioquinona) es de origen vegetal. En nuestra alimentación la encontramos principalmente en las verduras verdes, en ciertos aceites vegetales (colza o saja) y en la yema de huevo (principalmente crudo). Interviene en los fenómenos de coagulación de la sangre.

En cuanto a la vitamina K2 (menaquinona), es fabricada por nuestro propio organismo y más precisamente por la flora intestinal (bacterias E-coli) a condición de éstas estén en buen estado. No obstante, es posible encontrarla en la alimentación en los aceites de pescado, en el yogur, quesos, en la leche y el hígado.

La vitamina K2 permite fijar el calcio en el lugar adecuado! Los aportes naturales de calcio no se depositan normalmente más que en dos lugares: los huesos y los dientes. Desafortunadamente, con la edad, depósitos anormales de calcio pueden aparecer en otros tejidos tales como las paredes internas de las arterias. Este fenómeno es conocido como arteriosclerosis (endurecimiento de las arterias). Esto viene del hecho de que envejeciendo, el cuerpo pierde la capacidad de regular el balance cálcico. Éste se efectúa entonces en una mala dirección y el calcio abandona los huesos (osteoporosis), para fijarse en las arterias (arteriosclerosis).

La vitamina K2 ayuda a regular este balance conservando el calcio en los huesos más que dejarle emigrar hacia las arterias. Mejor aún, las últimas investigaciones indican que la vitamina K2 permite incluso invertir el fenómeno de calcificación arterial, lo que la convierte en el único tratamiento conocido actualmente de la arteriosclerosis.

La vitamina K2: la vitamina anti-edad

Acabamos de explicar que envejeciendo, depósitos de calcio tienen tendencia a acumularse en los tejidos blandos e inadecuados del organismo. A través de autopsias en personas mayores, los médicos han constatado la falta de flexibilidad de ciertos tejidos que parecen una piedra. Esta calcificación no fisiológica podría estar implicada en numerosas enfermedades que afectan a las personas mayores. Este es el caso de los cálculos renales, de la artritis, las cataratas, la insuficiencia de las válvulas cardíacas, de las fracturas óseas, de la piel arrugada, de la senilidad y, por supuesto, la arteriosclerosis que afecta el sistema vascular. Restablecer una tasa normal de vitamina K2 contribuye a protegerse de todos estos problemas. Así, numerosos investigadores consideran a esta vitamina como uno de los nutrientes más importantes para frenar el envejecimiento. 

Un grupo de expertos europeos se ha pronunciado recientemente sobre el beneficio aportado por la suplementación de 100 a 150 (…) de vitamina K2 en una población que la consumía por medio de suplementos alimenticios naturales. 

La solución ideal: unir Vitamina D3 y Vitamina K2 en forma liposomal

Sabemos ahora con certitud que los aportes de substancias naturales en forma liposomal son netamente mejores que en otras formas.

La vitamina D3 y la vitamina K2 existen ahora bajo esta nueva forma liposomal, forma que potencia considerablemente su absorción intestinal y por lo tanto sus efectos fisiológicos.

Recordamos que los liposomas son pequeñas vesículas formadas de una bicapa fosfolipídica presentando un compartimento central acuoso en el que es encapsulado el tipo activo útil. Esta encapsulación evita los ataques ácidos del estómago y permite entregar el producto directamente en la sangre. De allí, será directamente vehiculizado intacto hasta las células.

El secreto de esta nueva tecnología reside en el hecho que el producto es protegido por la microesfera liposomal. De allí no saldrá hasta que la cápsula fosfolipídica entrará en contacto con la membrana lipídica de una célula. El principio activo totalmente intacto es entonces transferido directamente al corazón de la célula, donde podrá estar activo!

Presentación: frasco de 30ml. (producto líquido)

Ingredientes: Agua purificada; Fosfatidilcolina no hidrogenada (extraída del Girasol, Helianthus annuus); Colecalciferol (Vitamina D3); Aroma de origen natural; Menaquinona (Vitamina K2, extraída de soja fermentada en forma de Menaquinona-7); Emulgente: goma arábiga; Espesante: Goma xantana; Conservador: Sorbato potásico. 

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